Organizaciones Intermedias



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Cronología

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Concepto

Uno de los temas que han adquirido importancia en el contexto contemporáneo de Sociedad Civil es el énfasis en las "organizaciones intermedias" o grupos voluntarios que ocurren a veces naturalmente en la sociedad, donde se aprende la civilidad, y donde la multiplicidad de alternativas ayuda a desarrollar la libertad y la creatividad. El filósofo político Michael Walzer enfatiza el valor de las "redes formadas para el beneficio de la familia, la fe, interereses e ideologías... personas asociándose libremente y comunicándose unos con otros, formando y reformando todo tipo de grupos." [1]


Walzer acredita[2] a Adam Ferguson como el iniciador de este enfoque, como vemos en la cita:


Antes de que haber instituciones políticas, los hombres están calificados por la diversidad de sus talentos, por los distintos tonos de espíritu y por el ardor de sus pasiones, a actuar en distintos roles. Reúnanlos y cada uno encontrará su lugar... y de esta manera actuarán en compañía, y preservarán sus comunidades, antes de que se otorguen cargos oficiales...[3]



Michael Walzer
 Fuente de la foto: Wikipedia
(dominio público)

Ferguson busca el efecto balanceador del proceso de asociarse: "La seguridad de cada individuo, y su consecuencia política dependen mucho en el, pero aún más dependen del partido a que se una. Por esta razón, todos aquellos que sientan un interés común deben de unirse en partidos; y hasta lo que este interés lo requiera, se deben de apoyar mutualmente."[4]


Las Sociedades de Amigos del País

Un buen ejemplo de organizaciones históricas buscando el bien común ocurrió en España. Xavier María de Munibe (1723-1785) Conde de Peñaflorida y un grupo de sus amigos de la nobleza en los países vascos de España fundaron la Real Sociedad Bascongada de Amigos del País en 1763. Peñaflorida había estudiado las matemáticas y la física experimental y se dedicó a la aplicación de  las ciencias al desarrollo económico.[5] La Sociedad se concentró en mejorar las técnicas agrícolas e industriales a través de estudios, publicaciones y concursos.[6] Debido al gran resultado de este intento, sociedades similares se organizaron en el resto de España y en las colonias españolas, algunas de la cuales todavía funcionan.[7] En el contexto moderno, empresarios e intelectuales han remplazado la función de los nobles. Otro ejemplo muy activo de estas sociedades es La Sociedad Económica Barcelonesa de Amigos del País.


Instituciones Educacionales

Las Instituciones Educacionales, tanto públicas como privadas, son un elemento esencial de la sociedad civil. Ellas son una fuente primaria para el desarrollo de una conciencia social. Como nos dice el importante educador John Bascom: "Es la función de la educación el forjar la conexión entre la vida individual y la vida en común, en disponerlas en apoyo mutuo... La Universidad debe de devolver a sus graduados a la comunidad de donde salieron como hombres de mente abierta y liberal, con una clara percepción del bienestar público y una dedicación a fomentarlo."[8] Además de su valor cultural y social, un título universitario es clave en la preparación para obtener empleo.


Sede de la primera  Sociedad de Amigos del País, Askoitia, Epaña
Foto: © Wikipedia Autor: Josu Goñi Etxabe

Organizaciones Laborales

Muchos de los beneficios sociales de hoy fueron el resultado histórico del  apoyo de sindicatos laborales. En los tiempos en que se debatían inicialmente los méritos del movimiento laboral en los Estados Unidos, John Bascom reflexionaba: "El movimiento laboral representa una unión de fuerzas económicas y sociales. Nos da una base firme para los sueldos, y gradualmente logra un standard de vida que hace operativas las ambiciones positivas."[9] Muchos sindicatos ofrecen programas de aprendizaje que permiten a participantes desarrollar habilidades de oficio, como el programa del   Carpenters Training Institute y otros.



Foto: ©  carpenterstraininginstitute

Centros de Ayuda Mutua

Hay numerosas organizaciones que faciltan la ayuda mutua entre grupos. Un ejemplo de esto son las organizaciones que fueron llamadas "Casas de Asentamiento" o "Settlement Houses". Se desarrollaron principalmente en Inglaterra y los Estados Unidos a fines del siglo XIX. Consistían de locales en barrios pobres donde se proveían facilidades sociales y de entrenamiento para mejorar la situación de residentes del barrio, frecuentemente con la cooperación de una universidad cercana. Vamos a citar aquí el caso del "Chicago Commons", el cual todavía funciona.


El Chicago Commons fue fundado por Graham Taylor en 1894, el cual era profesor del Chicago Theological Seminary. En 1903, Taylor fundó la Escuela de Administración de Servicios Sociales en la Universidad de Chicago, la cual usó el asentamiento como lugar donde poner en práctica las enseñanzas de la Escuela. En la actualidad, la organización se concentra en proveer educación temprana para niños, cuidado de seniors y otros servicios familiares.



 Chicago Commons
Fuente de la foto:© Chicago Commons Association

Otro buen ejemplo son las organizaciones de ayuda a inmigrantes, como el Centro Educacional La Salle.  en la zona agrícola alrededor de Homestead en la Florida, Estados Unidos. Ademas de la ayuda básica y el apoyo educacional, este centro provee entrenamiento en oficios de oficinas y costura.


Las Iglesias

Las iglesias son tal vez las organizaciones más influyentes de la sociedad civil. Dagoberto Valdés y su grupo han contribuido de forma especial a la interpretación del rol de las iglesias en una sociedad civil:


La Iglesia es "signo" de la sociedad civil: Es decir, las Iglesias, por su estilo de vivir en comunidad de personas, en la búsqueda del bien común, en la lucha por la justicia y la paz, en un estilo de convivencia fraterna, justa y solidaria, son y deben ser signo, señal, adelanto, de lo que aspira ser toda la sociedad civil.[10]


Las Iglesias aportarían, a su vez, un ingrediente de purificación y renovación de la misma sociedad civil, de la que la Iglesia forma parte y a la que está llamada a servir como fermento en la masa, como generadora de espacios de participación , como articuladora de redes de solidaridades y servicios.[11]


Es lo apropiado que las iglesias defiendan principios morales que no están actualmente aceptados por la mayoría de la sociedad de a cual es parte. Recordemos que la abolición de la esclavitud mundialmente fue principalmente el resultado del empuje de grupos religiosos.


Organizaciones Cívicas

Hay organizaciones, que pudiéramos llamar "organizaciones cívicas", que están dedicadas a poner en práctica los principios de la sociedad civil. Convivencia es un buen ejemplo de este tipo de organización. Liderada por Dagoberto Valdés Hernández, propone el uso de estos principios para gestionar los problemas de Cuba.  A través de actividades educacionales y otros esfuerzos, su grupo trata de avivar un sentido cívico y fomentar actividades de grupo:

Una educación ética y cívica para la vida pública puede formar ciudadanos fraternos y propositivos. Asegurarse en la convicción de que todos somos hermanos y por tanto perfectibles, frágiles, sujetos de errores y limitaciones. La amistad cívica… [enseña] a cuidar a los ciudadanos, poner su vida y su dignidad como valor supremo; contribuir a la prosperidad del país; y aprender a ejercer la subsidiaridad y la solidaridad con los más vulnerables en la consecución de la felicidad personal posible y en el bien común alcanzable.[12]






Foto:© Centro de Estudios Convivencia

Mis traducciones al español
[1] Michael Walzer, “The Concept of Civil Society” in Michael Walzer, ed., Toward a Global Civil Society (New York: Berghahn Books, 2002), 7,16.

[2] Michael Walzer, "Introduction" in Michael Walzer, ed., Toward a Global Civil Society, 1.

[3] Adam Ferguson,  An Essay on the History of Civil Society (Dublin: Boulter Grierson, 1767), 93.

[4] Adam Ferguson, An Essay on the History of Civil Society, 243.

[5] Joaquín Iriarte, S.J., El Conde de Peñaflorda y la Real Sociedad Bascongada de los Amigos del País (Donostia-San Sebastián: Colección Ilustración Vasca, 1991),  46.

[6] José de Aralar, El Conde de Peñaflorida y los Caballeritos de Azkoitia ( Buenos Aires: Editorial Vasca Ekin, 1942),  91-95.

[7] Robert Jones Shafer, The Economic Societies in the Spanish World  (Syracuse, New York: Syracuse University Press, 1958), 48-52.

[8] John Bascom. Sermons and Addresses (New York and London:G. P. Putnam's Sons, 1913), 189-190, 195.

[9] John Bascom "Economics and Ethics" in Bibliotheca Sacra, April - June 1905, 224

[10] Dagoberto Valdés Hernández et al., Etica y Civica, 303.

[11]  Ibid., 274.

[12] Dagoberto Valdés Hernández, Un Umbral para la Ciudadanía y la Sociedad Civil en Cuba, my translation (Cuba: Ediciones Convivencia, 2016), 201.

[13] Dagoberto Valdés Hernández et al., Etica y Civica, my translation (Cuba: Ediciones Convivencia, 2014), 20.