Renacimientos



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Las Primeras Universidades

El desarrollo de la civilización occidental se ha destacado por momentos especiales cuando un número de factores se reúnen para hacer posible un brote de cultura y humanismo. Estos brotes frecuentemente se citan como "renacimientos." El nacimiento de la educación universitaria ocurrió durante uno de estos períodos, conocido como el Renacimiento del Siglo Doce.


La vida cultural resurgió gradualmente durante la edad media. Algunos centros brillaron debido al liderazgo de obispos y profesores individuales. Uno de los mas importantes de estos centros fue París, donde había varias escuelas avanzadas.  Después del medio del siglo doce, el número de profesores y estudiantes en París requirió alguna forma de organización. Los profesores proveyeron el liderazgo, y se establecieron regulaciones sobre las asignaturas y el tiempo de estudios. Algo parecido sucedió en Bologna, pero allí fueron los estudiantes los que tomaron la iniciativa. La fecha de la fundación de la Universidad de Oxford no se ha establecido, pero esta adquirió importancia después de 1167.


John de Salisbury, quien estudió en París, apreció mucho su educación y celebra el valor de el conservar y transmitir el conocimiento: "Lo que varios individuos dedicaron sus vidas a investigar, se puede ahora fácil y rápidamente aprender por una persona. Nuestra generación disfruta el legado que nos han hecho los que nos precedieron."[1] Y continúa con una famosa cita de uno de sus profesores: "Bernard de Chartres nos comparaba a enanos montados en los hombros de gigantes."[2]


Las Profesiones Medievales

En el transcurso de la Edad Media, muchos monasterios tenían enfermerías y herbarios para el cuidado médico de los monjes. Beneficiados por el contacto  con árabes en Sicilia, los monjes en Monte Cassino y Salerno en Italia tradujeron al latín un número de obras médicas griegas y árabes durante el siglo once, convirtiendo a Salerno en un importante centro de educación médica.

[3]


Al principio de la Edad Media el único mecanismo legal en uso era basado en las tradiciones germánicas con elementos romanos y principalmente en forma verbal. Durante el siglo doce se empezaron a poner por escrito algunas de estas leyes. El proceso de formalización legal fue principalmente el resultado de el liderazgo de Bologna, donde una serie de respetados profesores desarrollaron a esta universidad como la mas prominente escuela legal en el siglo doce.



Catedral de Chartres
Photo Source: Wikipedia

El arte de la construcción se preservó y cultivó  a través de toda la Edad Media. La demanda resultante del progreso económico y una nueva apreciación de detalles artísticos propulsaron el desarrollo del oficio de maestros albañiles. La arquitectura e ingeniería no se formarían como profesiones científicas hasta varios siglos después, pero está claro que en la construcción de las grandes catedrales góticas, los maestros albañiles avanzaron su arte y profesionalismo durante la Edad Media.


El Renacimiento Florentino

El mas famoso renacimiento, la resurgencia en Florencia comenzando al principio del siglo catorce, fue principalmente  en literatura y algunas de las artes visuales que habían estado en decadencia. Durante este período, varias de las ciudades del norte de Italia se convirtieron en repúblicas independientes. Florencia fue una de estas ciudades, facilitado por sus sectores comerciales y bancarios.


El Renacimiento en el Norte de Europa

El renovado interés en la civilización clásica y el sentido de humanismo se esparció de Florencia al resto de Italia y después por toda Europa, facilitado por la invención de la imprenta. En el norte de Europa este desarrollo ocurrió durante los finales del siglo quince y los principios del siglo dieciséis. Esto incluyó importantes intelectuales como Erasmo de Rotterdam y  Juan Luis Vives (1492-1540).


Palacio Vecchio, Florencia
Foto  © Margarita Gavaldá Romagosa

Vives estudió en las universidades de París y Lovaina, y enseñó en Lovaina y Oxford, pero no quedó satisfecho con estas experiencias, y, en 1531, decidió escribir un largo volumen sobre sus ideas sobre la educación, La Transmisión del Conocimiento. En este trabajo Vives le da a la búsqueda de conocimiento un sentido vocacional: 


Habiendo adquirido nuestro conocimiento, le debemos de dar utilidad, y usarlo para el bien común... Con confianza entonces tenemos que estudiar todas la ramas del conocimiento, para darles el uso que Dios le designó.[5]


Este conocimiento que Vives quiere poner a un uso social no es solo el resultado del esfuerzo individual, sino que se desarrolla y preserva como un patrimonio de la raza humana:


Una primera experiencia, seguida por otra, admirada por su novedad, se apuntó para su uso en la vida; de un número de experimentos separados, la mente reconoció una ley universal... Entonces se le entregó a la posteridad. Otros hombres añadieron elementos que tendían al mismo uso y fin. Este material, recolectado de gran y distinguido intelecto, constituyeron las ramas del saber.[5]




Juan Luis Vives
Fuente de la foto: Wikipedia
(domino público)

Las Ramas del Saber

Vives provee una evaluación detallada de algunas de las ramas del conocimiento de su tiempo y de sus funciones sociales, incluyendo las ciencias sociales, al historia, y las profesiones de la medicina y el derecho:


Todas la  humanidades son partes de la sabiduría; de allí surgen las ciencias que los griegos conocen como ética, economía y política... Si se excluyeran por completo, el hombre no pudiera vivir, y si se removieran parcialmente, no pudiera vivir una vida humana, sino la vida de bestias o salvajes. [6]


Consideremos la medicina. Este arte tiene poder sobre la vida y la muerte. Ningún  rey ni emperador ha tenido un poder mayor. Por eso Dios demanda que el médico sea diligente, que practique con un trato tan sabio y afectuoso como sea posible, esas materias que se le asignan a su buena fe y autoridad.[7]


Los estados y asambleas se unen por la justicia como si fuera una goma. La justicia  es lo que preserva el alma de la sociedad humana... Los que defienden e interpretan las leyes son llamados jurisconsultos... Es la función y oficio de un verdadero y seguro jurisconsulto el explicar el sentido y espíritu de las leyes, para poder descubrir la justicia presente en cada ley.[8]


Las traducciones del inglés son mías.

[1] John of Salisbury, The Metalogicon (Westport, CO: Greenwood Press, 1955), 36.

[2] Ibid.

[3] Richard C. Dales, The Intellectual Life of Western Europe in the Middle Ages, second edition (Leiden, The Netherlands: E.J. Brill, 1995), 151-152.

[4] Juan Luis Vives, "The Transmission of Knowledge" in Vives: On Education, (Cambridge: Cambridge University Press, 1913), 283-284.

[5] Ibid., 20.

[6] Ibid., 15.

[7] Ibid., 216.

[8] Ibid., 261-262.